Si me pidieran describir tus besos
y las reacciones que me despertaban
no acabaría de narrar los excesos
que a cometer tus labios me orillaban.
Aquellos besos tenían la magia
que nos hacía entregarnos completos
aun los recuerdo con mucha nostalgia
y aun me motivan a escribir sonetos.
Esos besos formaron la prisión
de la que no queríamos escapar,
gozábamos con esa reclusión.
Que habría de sumergirnos en dolor
cuando se terminara la pasión
y viéramos que nunca hubo amor.
Muy buen soneto.
ResponderBorrarFelicidades
No se porque salio mi comentario como anónimo.
ResponderBorrarDa igual lo repito, tu soneto de fábula...
me encanto!!
Mariola
No se porque mi comentario sale anónimo.
ResponderBorrarDa igual. Este soneto es de fábula!!
Me encanto
Mariola